Aerosmith ha pasado a la historia como una de las grandes bandas de rock americanas. Una de las que más discos ha vendido de todos los tiempos (150 millones). Pero lo que quizá no todos saben es que hace 30 años ‘los Chicos Malos de Boston’ fueron pioneros en la revolución ‘online’ de la industria musical.
Según el bajista Tom Hamilton: “La falta de interés de los fans en ‘Head first’ hizo que cuestionara mi capacidad para juzgar mi propia música”. Situémonos. En 1994 no había muchos sitios en los que se pudiera escuchar música en ‘streaming’ o descargarla. No existía Spotify, ni iTunes, ni Tidal, ni Apple Music. No había iPods. Solo unos pocos privilegiados tenían ordenador con conexión a una primitiva versión del Internet que hoy conocemos, la velocidad de navegación era lentísima, se producían cortes… y así las cosas, apareció Aerosmith regalando una canción.
‘Head first’ era un descarte de las sesiones de ‘Get a grip’ (1993), el undécimo álbum de Aerosmith y el más vendido del grupo a nivel mundial (20 millones de copias). Un total de 10.000 suscriptores de CompuServe se la descargaron durante las dos semanas que estuvo disponible.
Tener a Aerosmith a bordo, dijo Wood en ‘Vice’, suponía un testamento para la banda. “Ellos tuvieron una estupenda actitud y el deseo de impulsar la industria, y no manifestaron ningún miedo a hacerlo. Cediéndonos una canción inédita demostraron que estaban comprometidos”. Sin embargo, la respuesta poco entusiasta, al menos de los fans, sí tuvo un impacto en el bajista del grupo Tom Hamilton: “La falta de interés de los fans en ‘Head first’ hizo que me cuestionara mi capacidad para juzgar mi propia música”, dijo en ‘Vice’. “Estábamos acostumbrados a creer que las canciones que nos gustaban a nosotros eran las canciones que les gustaba a los fans”.