Para reflexionar; en el mundo existen más personas que teléfonos móviles, alrededor de 5.500 millones de dispositivos circulan por el planeta, lo cual nos da el 70% de la población a nivel mundial cuenta con uno.

¿Cuál es el impacto tiene el teléfono móvil en el planeta?

Hoy en día podríamos decir que vivir sin teléfono móvil es impensable, imposible para muchos, sobre todo por la inmediatez que vivimos en estos tiempos. Pero ¿Es posible que un teléfono móvil sea sostenible?

Es indudable que cada vez más personas conocen las consecuencias de la manera de consumo que se ha adoptado. En el mercado de los teléfonos móviles, los cuales son una parte potencial del problema, ya que este se encuentra principalmente en la materia prima y su extracción.

El 80% de las reservas mundiales de el oro negro se encuentra en la República Democrática del Congo. Su extracción masiva ha ocasionado conflictos por lograr el control de las minas. Incluso fuertes acusaciones de abuso en el área laboral se han hecho evidentes. Situación que no es expuesta en los medios de comunicación. Esto ha provocado que organizaciones y los derechos humanos logren cambios, obligando y orillando a los creadores a ser más transparentes.

Con las condiciones de obtención de materias primas y fabricación de estos aparatos se conoce y relaciona la obsolescencia programada, que muchos ciudadanos han denunciado. La durabilidad de los teléfonos es menor a la que deberían y esto es a causa de que la industria saca nuevos modelos, más potentes e inservibles a la larga. Según MarketWatch la vida de un teléfono esta entre los 18 a 24 meses, actualmente.

La Unión Europea ha tomado medidas con el derecho a reparar, aprobado en 2020 y entró en vigor el 1 de marzo de 2021. Esta legislación busca alargar la vida útil de los dispositivos electrónicos y con el objetivo de alcanzar el modelo de economía circular para el 2050 en el marco del Pacto Verde Europeo.

Las 3 R

Algunas empresas han lanzado al mercado dispositivos con bajo impacto ambiental, duraderos y socialmente responsables. Esto no se vuelve suficiente, lo más justo y sostenible seria regresar y practicar las 3 R del ecologismo: “Reducir, reutilizar y reciclar”.

Hablando de los teléfonos móviles, hay una R más que ha sido sonada por muchos al momento de interesarse por un dispositivo de estos: reacondicionar, el din de esto es reparar un dispositivo para que su funcionamiento sea el adecuado o bien como de nuevo, pero con variaciones en su valor final.

No es contradictorio tener teléfono móvil y ser sostenible, porque podemos serlo de muchas maneras… Es una cosa a tener en cuenta, como hay que tener en cuenta cómo comemos, cómo nos movemos, cómo consumimos moda, etc… una de las cosas que está asociada a la sostenibilidad es el número de cosas que tienes. Es importante decrecer, consumir menos y mejor. Recuerda Celia Ojeda, responsable de Biodiversidad y Consumo de Greenpeace.

Un de los problemas que señala Ojeda es que no solo se trata del Coltán el mineral necesario para el funcionamiento de los móviles:

Para fabricar un teléfono hace falta mucha energía procedente de combustibles fósiles, por lo que contamina desde su origen. Además, también conviene fijarse en otros elementos, como el packaging en el que viene envuelto, y en el que a menudo sobra mucho plástico de un solo uso.

Todo tiene que ver con lo que tenemos, pero tiene más que ver con el uso que le damos a lo que tenemos.

Tenemos que ser consumidores consientes.